LA PESTE NEGRA Y SUS CONSECUENCIAS EN LA EUROPA DEL RENACIMIENTO
Ahora que en nuestro día a día la palabra pandemia es cotidiana, no debemos olvidarnos de otras epidemias que han azotado nuestra historia.
La peste negra es una de ellas. Asoló Europa entre los años 1347 y 1400 debido a que transmisión se realizaba a través de animales como pulgas u otros parásitos de ratas, animales que convivían con humanos en esa época. Ese periodo fue el de mayor virulencia, pero la peste negra no desapareció tras el año 1400, sino que fue teniendo brotes localizados, quedando registrado en 1720 uno de ellos.
Si actualmente tememos los efectos que vaya a traer el Covid 19, entonces, con mayores deficiencias en sanidad e higiene, la Peste negra se cobró la vida de un cuarto de la población.
La epidemia tuvo efectos directos sobre la economía y la sociedad: reducción de producción y del consumo que supusieron la recesión económica más drástica de la historia.
La Peste Negra supuso y un punto de inflexión para una Europa superpoblada en la que la tierra cultivable escaseaba. La epidemia produjo un efecto revolucionario, la reducción de trabajadores por la alta mortalidad dio valor a los que quedaron. Campesinos que hasta entonces no tenían voz, comenzaron a poder negociar, dándose incluso revueltas campesinas que concluyeron con una mejora en las condiciones de los campesinos.
Debido a que la demanda global de producto agrícola se redujo, terrenos menos productivos fueron dedicados a ganado. Esto influyo en los hábitos alimenticios de la población menos adinerada, que pasó a disponer de proteína animal.
Todos estos cambios derivan en el comienzo del Renacimiento, un periodo que destaca por el auge de la expresión artística. En estas versiones artísticas se pueden observar los frutos que la peste negra dejó: una sociedad inmersa en una gran depresión y tristeza, con miedos.
Además, la peste produjo un auge en la inclinación científica y observación, mostrándose los ciudadanos más cuidadosos con la prevención de epidemias y dando pie a la epidemiología moderna.
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